Corren tiempos de cambio, eso dicen, pero…¿Quién mueve ese cambio? No voy a entrar en ello, pero con el título de esta entrada y en mi “sopa de letras” quiero expresar, a día de hoy y sobre mi manera de moverme con mi vehículo, si es accesible o no el vehículo eléctrico frente al de combustión estando y perteneciendo a la clase baja como la que pertenezco.
La movilidad eléctrica es el futuro, pero…¿Para quién? Para
mi desde luego que no. Y paso a explicarlo:
Soy un trabajador que desde hace 18 años trabaja en la
empresa privada, he podido campear con éxito la “desaceleración económica” de
Zapatero, la crisis del 2012, la pandemia de las narices del 2020 y ahora los “síntomas
de relentización”. Mi sueldo es variable mensualmente dependiendo del trabajo
extra que pueda realizar cada mes, pero no deja de estar sobre los 1500
euros/mensuales. Soporto una hipoteca alcista de aquellos jóvenes que ninguna
formación económica tenía para poder decidir entre intereses fijos o variables
y además pago todas mis deudas y estoy al día con ellas. Con esta foto fija y
al grano sobre el tema de movilidad, paso a describir como me muevo y que
vehículo tengo para ir entrando poco a poco en la cuestión de esta entrada.
Actualmente poseo una Volkswagen Transporte T5, de
combustión, es un vehículo importado de Alemania y fabricado en 2014. La
adquirí en 2019, por que me parece desorbitado y casi inalcanzable adquirir este modelo completamente nuevo, su precio rondaría los 32.000 euros. Su consumo medio, dada mi manera tranquila de conducir, ronda
los 6,5 litros (los que se han montado en mis vehículos saben que no paso de
110 km/h). Con ella suelo realizar unos 20.000-25.000 kilómetros al año, utilizándola
únicamente para mis actividades de ocio y desplazamientos dentro de la
provincia de Córdoba: pajareo, dar una charla, salir en la bici en una zona geográfica
diferente a mi residencia habitual, etc. El precio del vehículo fue de 16.000
euros. Y los mantenimientos anuales rondan los 350 euros de media. Dispongo de
este tipo de vehículo por que para mi vida en la que viajo y disfruto de cada
momento este es vehículo que necesito:
-Tiene gran capacidad de carga.
-Las bicis me entran sin desmontar.
-La utilizo como furgoneta camper, duermo una media de 40 noches
al año en ella.
-Funciona como un
turismo y está matriculada como un turismo (ITV cada dos años en los 10
primeros años).
Este es mi vehículo y este por el momento seguirá siéndolo.
Mi estilo de vida es el que es y salvo cambiar alguna “pieza”
de mi puzle viviente, en su conjunto es más que suficiente, adecuado y
disfrutado por mí.
Ahora bien, si el “Sistema” me obliga a que me electrifique…¿Qué
hago? ¿Dejo mi estilo de vida, mi calidad de vida tal y como la conozco y me compro
un coche eléctrico en el que no poder disfrutar como hasta ahora? Y digo
cambiar a coche eléctrico porque adquirir una furgoneta eléctrica para seguir
en la misma línea en la que sigo la inversión sería de aproximadamente 60.000
euros (he visto pisos y viviendas en Córdoba provincia por menos de ese
dinero…), que evidentemente no tengo…Si adquiriera actualmente la VW T5 eléctrica
denominada ID. Buzz, en cualquiera de sus dos versiones: Pro y Cargo, su precio rondaría ente los 63.000 euros y 58.000 euros, respectivamente. Además,
la autonomía por carga eléctrica y por el momento en este segmento de vehículos,
ronda los 450km.
Algún lector podrá pensar…Juer Ivan pues píllate otra
furgoneta eléctrica más económica…Vemos si hay opciones:
-Ford E-Transit ya está disponible en España y parte de los 71.200
euros
El precio de la Fiat E-Ducato parte desde 58.310
euros.
-Mercedes eSprinter su precio es de 58.971 euros.
Opciones hay, eso sí, siempre y cuando, por ejemplo, me
metiera en política o me hiciera alto funcionario y mi nómina anual fuera de más de 60.000 euros mínimo e incluso si pensara en buscarla de ocasión, a día de hoy, no hay disponibilidad y dudo que el precio fuera al menos razonable bajo mi punto de vista. Como no estoy en la liga de poder soltar 50.000 euros en un vehículo…sigo escribiendo.
Otro lector seguirá pensando…Pero Ivan, pues tendrás que cambiar
de vida y dejar de viajar en furgo, para ello tendrás que buscarte un vehículo
más pequeño y adaptarte a él.
Supongamos que así lo hago…¿Qué opciones tengo? Veamos pues el segmento de vehículos utilitarios de ciudad (ni se me pasa por la cabeza un SUV):
-Dacia Spring (desde 20.555 euros)
-Peugeot e-208 (desde 34.170 euros)
Estos dos vehículos son alguno de los utilitarios más bajos
en precio del mercado. Sin sitio para las bicis y sin sitio para dormir dentro…Además
hay que cargar baterías cada 300 km. Pero joder, que yo no quiero un coche pequeño, que yo quiero una furgoneta para ser feliz y seguir con mi cantinela furgonetera.
Jodido se presenta el asunto por el momento:
A) 16.000 euros de mi furgoneta VS furgoneta eléctrica por
una media de 58.000 euros.
B) 16.000 euros de mi furgoneta VS “caja de cerillos” electrificada
por una media de 25.000 euros.
De nuevo otro lector me podrá indicar…Ya Ivan, pero
cargar un coche eléctrico (el que sea) es más económico que seguir apostando
por el combustible tradicional…Ummm ¿seguro? Objetivamente si, pero hay que mirar más cositas, sino te estas engañando a ti mismo.
Vamos a los números y ojo que aquí no vale solo el precio de
la recarga, creo que hay que mirar los siguientes aspectos:
-Tiempo que el vehículo va a estar en tus manos: Para mi lo normal,
el horizonte que tiene un vehículo de mi propiedad y salvo una excepción
(aumento de la familia) es de 10 años. A día de hoy como está jugando el lobby
automovilístico con los usuarios, con el fomento del renting (engañabobos para tenerte
pillado hasta los hue…) en el que a los cinco años lo pagas y te lo quedas...o
lo cambias…tiene truco: La realidad psicológica de una compra es que hormonalmente
dura en el tiempo muy poco y las ganas de comprar y adquirir un juguete nuevo
pueden más que la de conformarnos con lo que tenemos, con lo cual caerás en la
trampa de cambiar de vehículo sin llegar a ese horizonte de 10 años.
-Kilómetros recorridos anualmente: En esta entrada hablo de
mis kilómetros y discuto sobre mi utilitario, mi forma de moverme y mis
necesidades.
-Inversión de adquisición: Ya he colocado las horquillas de precio y
considero para lo que viene a continuación el precio de los vehículos totales,
excluyendo financiaciones.
-No he añadido el coste de seguros en los cálculos que he realizado.
Viendo las dos imágenes la conclusión de coste anual de un vehículo y otro creo que es destacable. Casi 3100 euros de diferencia entre ambas opciones si tomo de referencia que el vehículo eléctrico se carga en tu vivienda particular, pues si no cargas en casa, nos vamos a los 3600 euros.
CONCLUSIONES:
1) En mi caso particular el que analizo en esta entrada y he expuesto, no me interesa para nada mirar un vehículo eléctrico que no me obligue a modificar mi estilo de vida y la forma de movilidad que tengo en la actualidad.
2) Con 3.100 euros de diferencia anuales en los costes de una furgoneta eléctrica vs una furgoneta de combustión, aun tengo margen para poder abordar las subidas y bajadas del precio de los combustibles.
3) En el caso de que tuviera un chalet, o casa con la capacidad suficiente para colocar paneles solares y poder cargar el vehículo eléctrico a coste CERO (mis paneles generarían la electricidad), al diferencia entre ambos casos sería de 1.000 euros menos. Nos quedaríamos con un coste anual para una furgo eléctrica de 6.100 euros frente a los 3.900 de la furgo de combustión. Y ojo, que entonces en la cuenta tendríamos que meter los 4.000 o 5.000 euros de la instalación de los paneles solares.
4) En mi humilde opinión y dado lo que tenemos en lo alto y lo que se nos viene a efectos de movilidad eléctrica, la desigualdad social está garantizada entre la clase alta y media frente a la clase baja que casi va al día. O se baja el precio de los coches eléctricos y se hace asequible, sin incluir las ayudas que pudieran darse y que pagamos todos, no se nos olvide, facilitamos una transición ecología digna y accesible (más allá de machacar nuestro medio agrario) o el problema igualitario nunca podrá abordarse.
5) A día de hoy no me planteo cambiar de vehículo a uno eléctrico, lo tengo claro y así lo he manifestado aquí, pero...si para el "Sistema" es tan importante la transición energética...¿porqué no han proliferado y se ha puesto toda la carne en el asador para que pueda electrificar a un precio razonable y adecuado mi vehículo actual? No tengo inconvenientes en hacerlo, pero como digo a un precio razonable y no los 40.000 euros que he visto y que pide un taller alemán por hacerlo. Si existe un problema abordémoslo, pero ¿habéis pensado que pasaría si pudieras electrificar tu coche por 6.000 o 7.000 euros con los concesionarios de venta de vehículos?
6) Por último, a los que no creen que yo esté apoyando un nuevo modelo sociedad más sostenible, tan solo decirles que en mi vida estoy aplicando lo que nos enseñaron en la escuela: las 3 "R": REDUCIR, REUTILIZAR Y RECICLAR. Viejo mensaje que nuestra sociedad está olvidando y dando la espalda.
-REDUCIR: Mi inversión en movilidad en un vehículo de ocasión es más baja que la de comprar un vehículo eléctrico.
-REUTILIZAR: Adquiero un vehículo de ocasión o de segunda mano que ya alguien no utiliza.
-RECICLO: Estoy dispuesto dentro de la medida de lo posible a reciclar mi vehículo de combustión a un vehículo eléctrico, siempre insisto, que sea algo razonable y asequible a mi bolsillo.
Saludos, seguimos, Ivan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario